Meter el pulgar al entrenar espalda en el gimnasio proporciona un agarre más sólido y seguro al levantar pesas, como barras o mancuernas. Esto ayuda a estabilizar los movimientos y a mantener la forma adecuada durante los ejercicios, reduciendo el riesgo de lesiones y mejorando la eficacia del entrenamiento al permitir levantar más peso de manera controlada. Además, al involucrar el pulgar en el agarre, se activan más músculos en la mano y el antebrazo, lo que contribuye a una mayor fuerza y estabilidad en todo el movimiento. #staystrong